Jueves - 28.Marzo.2024
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Historia de la marca OM

El primer automóvil con la marca OM apareció en 1918; sin embargo, los orígenes de la empresa son mucho más antiguos.

En 1849, Benedetto Grondona inició, en un pequeño taller de Milán, la construcción artesanal de coches de caballos, que pronto fueron considerados como los mejores de la época. Dicha actividad la continuó su hijo Felice quien, en 1857, constituyó una sociedad para la fabricación de vehículos de cualquier tipo, así como trabajos relativos a los ferrocarriles.

En 1880, Miani, socio de Grondona, se retiró de la sociedad y fundó, también en Milán, la Officine Miani, Venturi & C. para la construcción de una locomotora de vapor sobre proyecto de la SIGL de Viena. En 1882, la sociedad pasó a llamarse Miani, Silvestri & C. En 1890 se construyó una nueva fábrica, que fue el primer núcleo de la actual OM de Milán. En sus locales se realizó el primer tranvía eléctrico italiano.

En 1917, la Miani, Silvestri & C. adquirió la fábrica de automóviles Züst, de Brescia. En aquella época, la Züst poseía ya un pasado de más de 60 años de actividad. En efecto, derivaba de la sociedad Güllet & Croff, constituida en 1855 para la construcción de máquinas de cualquier tipo y automóviles accionados por pequeños motores de vapor. A principios de siglo, emprendió la fabricación de automóviles con motor de explosión. Los modelos 40/50 HP y 28/45 HP registraron cierto número de éxitos, iniciados en 1905 cuando un Züst debutó con una espléndida victoria al adjudicarse la Copa del Rey.

En 1906, con la nueva denominación de Brixia-Züst, se inició la construcción de la fábrica de Brescia, en la que, además de automóviles, se fabricaron camiones a partir de 1908. En 1912 se disolvió la sociedad y, en 1917, la fábrica de Brescia fue cedida a la OM (Societá Anónima Officine Meccaniche, antes Miani, Silvestri & C).

El primer automóvil con la marca OM se puso a la venta en 1918; era el tipo S 305, de 25/35 HP, que aún recordaba la línea típica de los Brixia. Este coche iba provisto de puesta en marcha y alumbrado eléctricos; su motor, de 4.710 ce, poseía válvulas laterales. Casi de la misma época fue el OM 465, de 12/15 HP, el primer automóvil de concepción realmente nueva, del cual derivaron los sucesivos OM de 4 cilindros. Su cilindrada era de 1.325 ce y la carrocería estándar era de tipo torpedo de 4 plazas.

Con este modelo apareció también por vez primera la característica sigla numérica que luego designó todos los motores fabricados por la OM; la primera cifra se refería al número de cilindros, mientras que las dos siguientes indicaban el diámetro de los cilindros.

En 1921 aparecieron el modelo 467 S y el 469, de 1.500 ce. La producción de este último tipo, construido entre los años 1922 y 1929, contribuyó mucho a la difusión de los automóviles de la marca. El radiador poseía ya la forma característica que, durante muchos años, distinguió los vehículos OM; el bastidor era de nuevo diseño, con suspensión delantera de ballesta y frenos en las 4 ruedas. Con el modelo 469 la OM ganó la categoría 1500 en la Copa de los Alpes de 1922.

Entre 1923 y 1929, la época de oro de la OM, se construyó el famoso 665, conocido como Superba, que conquistó numerosas victorias deportivas, entre ellas la Copa de los Alpes de 1923. En el año siguiente, la OM ganó una vez más la Copa de los Alpes, el récord mundial de las 48 h en la pista de Monza y otras manifestaciones importantes. En 1926, el Superba conquistó el récord de resistencia sobre un trazado de 15.000 km a un promedio de 103,568 km/h. Internacio-nalmente, cabe destacar la victoria del índice de Prestación de las 24 Horas de Le Mans de 1926, la Copa de San Sebastián de 1926 y el circuito de Neurberg de 1927.

En 1927, la OM inscribió definitivamente su nombre en el palmares de las carreras automovilísticas, ganando las primeras Mil Millas, la carrera más prestigiosa del mundo; de Brescia salieron 77 participantes, de los que se clasificaron 55 tras recorrer un trazado de 1.600 km. Ganó el OM 665 S, conducido por Minoia y Morandi, en 21 h y 5 mn, a un promedio de 77,238 km/h; el segundo y tercer clasificados fueron otros dos OM 665 S. Fue un triunfo para la OM, que de este modo se introdujo en el mercado mundial.

El modelo de 2 1 Sport, denominado Superba, estaba dotado de un motor monobloque de fundición de 6 cilindros, con una potencia de 45 CV a 3.500 rpm. Este motor quedó como un ejemplo clásico de excelente propulsor de prestaciones deportivas con válvulas monolaterales. La versión preparada expresamente para las Mil Millas poseía una potencia mayor, con 3 carburadores, y desarrollaba 65 CV a 4.000 rpm.

Este motor, dotado de cámaras de combustión de tipo Ricardo, se construyó en varias versiones, llegando a alcanzar 85 CV. A partir de 1929, el mismo 6 cilindros, dotado de un compresor de tipo Roots, equipó una serie de modelos deportivos caracterizados por su radiador inclinado; estos automóviles, con motores de 2.000 y 2.200 ce, poseían unas prestaciones muy brillantes en virtud de su reducido peso (818 kg).

En 1932, la OM proyectó y fabricó el modelo 32: un vehículo ligero con 4 ruedas motrices y motor Diesel refrigerado por aire, que podía superar pendientes de hasta 45°. En 1933, la OM pasó a formar parte del grupo Fiat, aunque continuó siendo una empresa autónoma, presentando al año siguiente el último prototipo de automóvil con la marca OM: el tipo OM V Alcyone, con motor de 6 cilindros, válvulas de admisión en cabeza y de escape laterales, con una cilindrada de 2.130 ce y una potencia de 65 CV (71x90mm).

Tras abandonar definitivamente la fabricación de automóviles, la OM se dedicó a la construcción de camiones, maquinaria agrícola y material ferroviario, pasando en 1967 a integrarse totalmente en el grupo de vehículos industriales de la Fiat.



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